Una imagen del festival en 2017. Francisco J. Fernández

En estas dos últimas semanas, junto al Festival de Cine -del que en unos días algo publicaremos por aquí-, hemos disfrutado de un buen manojo de conciertos. Empezamos el pasado 15 de abril en La Cochera Cabaret con M-Clan, que presentaban su gira acústica Desarmados. Seguimos dos días después en el Teatro Cervantes con el memorable recital de Juan Perro junto a Joan Vinyals y Gabriel Amargant.

Durante abril se celebró el MaF 2016, que en esta ocasión ha contado con 178 actividades culturales repartidas en 80 espacios. La proyección en el Albéniz de En Granada es posible, la charla que Andrés Trapiello ofreció en el Centro Cultural Provincial, o una simpática cata de vinos literaria en la librería Proteo fueron algunas a las que asistimos. El MaF se despidió el día 21 en el Teatro Echegaray con el concierto Spanish Crooners, un proyecto que reúne a Javier Corcobado y Conde versionando a Scott Walker, Raphael, Serge Gainsbourg, Nino Bravo o Frank Sinatra sin dejar de lado sus respectivas carreras en solitario. La colaboración surgió hace unos años tras una edición de La Música Contada (¿recuerdan?) y tendrá continuación próximamente en una serie de actuaciones aún sin fechas confirmadas.

Un día antes, Francisco Contreras (Niño de Elche) y Los Voluble presentaron RaVerdial en el Auditorio Edgar Neville dentro del ciclo La ciudad demudada organizado por La Térmica. La RaVerdial es definida como “una mezcla de rave (con toda la carga política y social de los orígenes de las fiestas underground) y verdiales (palo flamenco indisociable de la fiesta)”. Junto a Contreras y Los Voluble, encargados de las proyecciones y pirotecnias sonoras varias, encontramos sobre el escenario a Raúl Cantizano a la guitarra y a Pablo Peña, componente de los geniales Pony Bravo, manejando la caja de ritmos. En los apenas sesenta minutos que dura RaVerdial asistimos a una asombrosa combinación audiovisual del folclore más o menos popular -el flamenco, la Semana Santa, las fiestas de verdiales, el Rocío- con la política más actual, que es la del presente pero también la del pasado y, probablemente, la del futuro. Un espectáculo experimental a la par que emocional. Niño de Elche: escuchar y ver para creer.

El concierto de Sílvia Pérez Cruz en el Teatro Cervantes el pasado 1 de mayo sirvió para cerrar la 19 edición del Festival de Cine. Con todas las butacas ocupadas, Sílvia presentó su nuevo disco, Domus, que contiene las canciones que ha compuesto e interpretado para Cerca de tu casa, la película dirigida por Eduard Cortés sobre los desahucios ocurridos en España con motivo de la crisis económica.

Nuevos temas como Duérmete, Verde o No hay tanto pan -himno instantáneo- se mezclaron en el repertorio con Pequeño vals vienés, una versión de Lluis Llach o la adaptación de un poema de Ana María Moix. Jazz, flamenco, rancheras o habaneras: parece ser que nada se le resiste. Notable y merecido protagonismo para su banda de acompañamiento, compuesta por violines, violonchelo, contrabajo, guitarra, percusión y hasta un arpa.  Hacia el final se embarcó en una extensa improvisación que aunó a Los del Río, María del Monte, Beyoncé, Amy Winehouse o Mercedes Sosa. Su estremecedora versión de Gallo rojo, de Chicho Sánchez Ferlosio, sirvió para cerrar más de dos horas de un concierto mayúsculo.

Foto: Málaga de Cultura