
Doña Francisquita inaugura la 35 Temporada Lírica del Teatro Cervantes con Ismael Jordi y María José Moreno en los roles principales. La zarzuela regresa así al ciclo malagueño por la puerta grande, en una producción escénica del Teatro Villamarta de Jerez y musical del Teatro Cervantes que coincide con el centenario del estreno de uno de los títulos más relevantes del repertorio.
La «alegría de vivir» es según su director de escena, Francisco López, el «motor dramatúrgico» de la adaptación de esta obra del ‘género grande’ del maestro Amadeo Vives que se verá en las tablas del espacio municipal el viernes 29 de septiembre y el domingo 1 de octubre. La Orquesta Filarmónica de Málaga y su titular, José María Moreno Valiente, acompañarán desde el foso a los solistas y coro en este primer peldaño de la Temporada Lírica, cuyo programa completo vuelven a patrocinar Unicaja Banco y la Fundación Unicaja y cuenta con la colaboración del Grupo Quirónsalud, Fundación Sando e Idealista.
María José Moreno como Francisquita e Ismael Jordi en el rol de Fernando encarnan a la pareja de enamorados que vertebran esta comedia lírica en tres actos que los libretistas, Federico Romero y Guillermo Fernández-Shaw, ambientaron en el Madrid castizo con un argumento basado libremente en la comedia de Lope de Vega La discreta enamorada, a su vez inspirada en un cuento del Decamerón de Boccaccio. Les acompañarán en el resto de papeles principales Mónica Redondo (Aurora la Beltrana) y Jesús Álvarez (Cardona), a los que secundarán Milagros Martín (Doña Francisca), Santos Ariño (Don Matías), Antonio Torres (Lorenzo Pérez), Lucía Millán (Irene la del Pinto) y Luis Pacetti (lañador / sereno).
El director escénico de Doña Francisquita, Francisco López, y los dos protagonistas, Ismael Jordi y María José Moreno, han presentado esta mañana el montaje en una rueda de prensa conducida por la concejala de Cultura, Mariana Pineda, y en la que también han participado la responsable de Artes Escénicas de la Fundación Unicaja, Gema Domínguez, y la responsable de Comunicación y Marketing del Hospital Quirónsalud Málaga y representante del Grupo Quirónsalud, Violeta Segura. Aún quedan disponibles entradas para las dos funciones de la zarzuela.
Doña Francisquita es una zarzuela que creó escuela dentro del llamado género grande. Requiere la participación del Coro de Ópera de Málaga, como es habitual dirigido por María del Mar Muñoz Varo, así como de un cuerpo de baile con coreografía de Javier Latorre y una rondalla compuesta por miembros de la Orquesta de Pulso y Púa de Málaga. La escenografía que se instalará en el Cervantes es obra de Jesús Ruiz, responsable también del diseño de vestuario de un gran montaje en el que además participan, entre otros, María Lourdes Benítez (buhonera), Carolina Pérez (Doña Liberata), Elena Ramos (Doña Basilisa), Antonio Burgos (Juan Andrés) y Jesús Gómez (cofrade), miembros del Coro de Ópera de Málaga que intervienen como partiquinos (cantantes que ejecutan partes breves de las obras líricas). La producción se completa con numerosos actores que recrearán el ambiente del Madrid romántico de mediados del siglo XIX.
Esta obra maestra, afirma Francisco López, se sustenta en el «canto a la vida» que nace de la partitura de Amadeo Vives, que contiene éxitos rotundos e intemporales como la Canción del ruiseñor, la romanza Por el humo se sabe o el Coro de románticos, y de la reinterpretación de la obra de Lope facturada por sus libretistas. En sus notas al programa, el director de escena subraya que su propuesta antepone «lo coral sobre el detalle, la luz sobre la penumbra, el diverso colorido de la comedia frente a los oscuros presagios del momento histórico donde se estrenó». Y ello en un montaje que remarca esa suerte de «feminismo de época» que atraviesa la obra: «He querido que se escuche con nitidez la reivindicación de lo femenino que subyace en muchas de las intervenciones corales».