Luis Alberto Segura, en una imagen promocional. La Trinchera

Tras una década sin apenas descanso, L.A., el grupo mallorquín fundado por Luis Alberto Segura en 2004, anunció hace unas semanas un alto indefinido en el camino. «Es momento de cambios, momento de reflexionar, momento de experimentar», podemos leer en el comunicado. Son varias las causas que han llevado al grupo a aparcar un viaje que hasta el momento ha facturado cuatro discos, siendo el último de ellos King of beasts, editado el pasado año. Paran los relojes, pero antes Segura, junto a Ángel, Pep y Dimas, se embarcan en una gira que recorrerá todo el país y que se inició el pasado 10 de octubre en Madrid, continúa hoy en la Sala X de Sevilla y mañana sábado llegará a La Cochera Cabaret a partir de las 22:00 horas.

Dejasteis claro en el comunicado que se trataba de un “parón indefinido”, no de una separación. Es una decisión de los cuatro, entiendo. ¿Por qué?

Principalmente fue una decisión mía, consensuada y aprobada por todos. Y hay varios motivos, aunque el de más peso son los 10 años sin descanso y totalmente volcado en un único proyecto, L.A. Ahora llega el momento de dedicar tiempo a investigar nuevos parajes, nuevos sonidos y propuestas… Es algo que me apetece, y siempre me he dejado llevar por lo que me apetecía en todo momento; no quería dejar pasar la oportunidad de aprovechar la buena situación en la que estamos ahora para parar motores y aparcar L.A. en un buen garaje hasta nueva orden.

En el comunicado también hacéis referencia al día en que llegasteis a la Sala Costello de Madrid para presentaros y tocar ante distintas discográficas. ¿Cómo lo recuerdas ahora?

Lo recuerdo como un sueño. Un grupo de Mallorca, todos en nuestros 30’s y sin expectativa alguna, de repente teníamos a representantes de las discográficas que durante años me habían devuelto todas las maquetas que les mandé… y casi podía elegir con cual quería quedarme. El resto es historia.

¿Qué esperáis de estas últimas fechas? ¿Qué puede esperar el público de vosotros?

Las concebimos como fiestas de despedida, vamos a pasarlo en grande cada noche. Levamos casi 40 canciones donde elegir; prometen ser inolvidables.

¿Cómo fue el primer concierto de esta gira de despedida en Madrid el pasado 10 de octubre en la Sala Sol? 

Fue un show acústico donde tocaba yo solo con la gente a medio metro de mí. Hubo de todo: lagrimas, risas y, sobre todo, un maravilloso karaoke de más de 300 personas. Lo echaré de menos.

¿Habéis pensando en un repertorio especial y representativo de estos diez años de andadura?

Totalmente. Como te decía, hemos elegido 40 canciones aproximadamente.

¿Podéis adelantar alguna de esas “cosas maravillosas que vendrán” a las que hacéis referencia en el comunicado?

Ángel ha reactivado a los Vancouvers, mítica banda madrileña en la que empezó a tocar el bajo hace más de dos décadas. Pep está grabando con su antigua banda y promete dar mucho de que hablar. Dimas está trabajando creando música para Hollywood; mucha de la música que escuchamos en los tráilers de los grandes blockbusters americanos la ha creado él. Y por mi parte me he construido un estudio de grabación en casa y estoy volcado en experimentar, grabar, producir y crear la mayor cantidad de música posible.

Musicalmente, ¿qué te interesa ahora mismo?

Me sigue interesando descubrir y aprender cosas nuevas de artistas que encuentro por las redes y en la prensa americana y británica, así como seguir estudiando la música de los 60’s y 70’s: cómo grababan, qué usaban, cómo sonaban.

En estos diez años, ¿cuál ha sido la relación de L.A. con Málaga? Si mal no recuerdo, vuestras dos últimas actuaciones por aquí han sido en la fábrica de Cervezas Victoria el pasado mes de septiembre y en el Weekend Beach de Torre del Mar en 2017.

Siempre buena, todo son buenos recuerdos. Ese acústico en septiembre, concretamente, fue muy especial; aún siendo una fábrica enorme conseguimos crear un rollo muy mágico.

En pocas palabras, ¿cómo definirías estos diez años con L.A.?

MARAVILLOSOS.