
Marenostrum Fuengirola celebrará el próximo 25 de julio el primer evento de música electrónica masivo en el segundo verano de pandemia, para lo que se realizarán 3.000 test de antígenos previos a todos los asistentes, que podrán estar de pie y sin distancia social. Nina Kraviz, estrella mundial de este género musical, será cabeza de cartel de la primera edición del festival Castlepark, que también contará con las actuaciones de Héctor Oaks y Paco Guillén.
La idea parte de las reuniones entre promotores en el Bizkaya International Music Exposition (BIME), donde Marenostrum y los organizadores de varios de los eventos dentro de este espacio de conciertos veraniego estuvieron presentes. Tras la cita, unieron fuerzas con el despacho de abogados Symphathy for the Lawyer para darle forma y presentarlo ante la Junta de Andalucía. Será la primera vez que se haga un análisis masivo con test de antígenos a todos los asistentes a un evento musical en esta Comunidad. Este proyecto ‘burbuja’ fue presentado y debatido por la alcaldesa de Fuengirola, Ana Mula, y el concejal de Cultura en sendas reuniones con la consejera de Cultura, Patricia Del Pozo, y el consejero de Salud, Jesús Aguirre, que mostraron su conformidad con el mismo.
El Ejecutivo regional ha autorizado previamente este tipo de pruebas para la celebración de citas deportivas como el Andalucía Open de Golf en Marbella o la Spartan Race de Almería, así como un par de ferias comerciales en los palacios de congresos de Sevilla y Málaga, pero no hay precedentes en la región de este tipo de medidas en un evento musical donde se trata de congregar a tres mil personas bailando al aire libre y junto al mar. Esta ‘prueba de estrés’ supone la puesta en marcha del proyecto, donde el objetivo es que se llegue próximamente al 33 por ciento de la capacidad del espacio de Marenostrum Fuengirola, lo que supondrá que un total de 6.000 personas podrán asistir sin riesgo de contagio a eventos en los que se habilite la pista de baile.
Para tal fin, al comprar su entrada los asistentes deberán registrar todos sus datos para un posible rastreo y reservar su cita previa para hacerse el test de antígenos durante el mismo día del concierto. El 25 de julio, en unas instalaciones separadas del espacio donde actuarán Nina Kraviz, Héctor Oaks y Paco Guillén, se realizarán los tests de antígenos a todos los asistentes. La entrada será vinculada a la prueba mediante la aplicación oficial del festival, que comunicará el resultado de las pruebas antes de llegar al recinto. En el caso de ser positivo, la persona se dirigirá a un punto habilitado donde se activará el protocolo de prevención. Si es negativo, el asistente deberá mostrar el código QR en su móvil al llegar a la puerta de acceso, donde recibirá una mascarilla FFP2 proporcionada por la organización con un código de colores, se desinfectará las manos, pasará por las alfombras para los pies y podrá entrar al recinto.
La pista de baile se dividirá en tres zonas, cada una identificada con un color distinto: azul, blanco y negro. Las tres áreas serán burbujas diferenciadas en las que los asistentes tendrán a su disposición todos los servicios necesarios, sin posibilidad de acceder al resto de zonas que no permita la entrada adquirida. En cada sector habrá un acceso y aseos que se irán desinfectando durante toda la noche, así como bebida y comida que se deberán consumir en las terrazas habilitadas y no se podrán trasladar a la pista de baile, donde estará prohibido quitarse la mascarilla.